Cómo adaptarme, si por motivos de trabajo tengo que mudarme a otra ciudad.
enero 25, 2012 4 comentarios
¿Cómo es un proceso de adaptación normal? ¿Qué fases voy a pasar? ¿Cómo debo hacerlo adecuadamente?
A continuación te voy a presentar una guía, en la que te voy a explicar en que consiste el proceso de adaptación, las variables que intervienen en el proceso, las resistencias comunes que suelen presentarse y finalmente pasaré a darte una serie de recomendaciones mas concretas para poder adaptarte a vivir en otra ciudad. Todo ello basado en aspectos teóricos pero resaltando muy especialmente aquello que mi experiencia ha demostrado que ha facilitado mi adaptación.
Siempre menciono que para poder afrontar una situación o tengas que tomar algún tipo de decisión o actuación debes hacer un análisis de ti mismo y de tu realidad contextual, ello te permitirá principalmente cuatro cosas:
1º reducir tu grado de ansiedad e incertidumbre;
2º poder ser tu mismo el que controla la situación, o al menos el estilo de afrontamiento, sin depender tanto de los avatares y variables incontrolables de tu entorno;
3º aprender de una manera mas certera de tu experiencia;
4º entender con un criterio mas cercano a la realidad tu situación que seguro te va a proporcionar mayor probabilidad de éxito.
A: Qué es la adaptación y sus fases.
La capacidad de adaptación en términos generales, según las nuevas concepciones, está íntimamente relacionado con la inteligencia, quien se adapta mejor y en menor tiempo inferimos que es porque posee un mayor nivel de inteligencia, date cuenta que para adaptarte has tenido que poner en juego tus esquemas mentales que ya tenías establecidos, has tenido que abrirte a un proceso para asimilar algo nuevo del mundo exterior y acomodarlo a tus esquemas mentales ya existentes, teniendo que conseguir además de nuevo un equilibrio mental. Para todo este proceso has tenido que utilizar la mayoría de tus capacidades cognitivas superiores.
Las 3 Fases mas comunes en el proceso de adaptación:
1ª fase: Impacto inicial: Que sucede cuando te proponen o ves que vas a tener que cambiar de ciudad o país, probablemente sientas miedo o un peligro generado por el cambio, puedes sentir ansiedad y tu primera reacción normalmente será preferir quedarte en el pasado o como respuesta contrafóbica tirarte directamente a la piscina sin hacer realmente una valoración real.
2ª fase: Defensa/luna de miel: Una vez llegado al nuevo destino puede que te aferres a tus costumbres y tradiciones de tu ciudad de origen, la idealices y evites tu nueva realidad, quizás reacciones con apatía o rechazo hacia todo lo nuevo, pero sin embargo vas a ir empezando a realizar unas primeras valoraciones de las ventajas y desventajas que ofrece el cambio y así poder iniciar una etapa de aceptación.
Otra posible respuesta puede que sea aparentemente a la inversa, es decir que idealices el nuevo destino, que todo te sorprenda y maraville y superficialmente niegues o rechaces tu ciudad de origen, pero al final de igual manera harás valoraciones de tu nueva situación e iniciarás la siguiente fase de aceptación.
3ª fase: Aceptación: En base a tu experiencia nueva haces una valoración de tu nuevo entorno y acabas aceptando la situación de una manera mas serena y reflexiva, mas acorde a tu realidad.
4ª fase: Adaptación o asimilación: Ocurre cuando percibes que tu nuevo entorno ya no es extraño y has creado tu propia vida en él. Si la anterior etapa (aceptación) no la has resuelto adecuadamente, puede que te sientas algo deprimido y nostálgico, pudiendo anhelar o echar de menos, de una manera muy intensa, una vida idealizada en tu ciudad de origen, que no va a permitir adaptarte.
B: Resistencias comunes al proceso de adaptación.
1.- Resistencias relacionadas con tu personalidad de base: miedo a lo desconocido, prefieres un entorno totalmente estanco, miedo a la pérdida de identitaria (costumbres, raíces, etc..) sólo percibes y valoras una parte de la realidad, miedo por no controlar tu nuevo entorno, miedo al rechazo, etc..
2.- Resistencias relacionadas con nuestro sistema social: carácter sagrado de ciertas cosas, rechazo a todo lo diferente, rechazo a otras normas sociales y/o costumbres, carácter general individualista y poco altruista de la sociedad occidental, etc…
C: Guía básica y recomendaciones generales para adaptarme a vivir en otra ciudad.
Una vez que has comprendido en que consiste el proceso de adaptación, las posibles resistencias que puedes encontrarte y sobretodo haber aprendido a valorar o relativizar tus propias sensaciones, porque ya sabes que es parte de un desarrollo que evoluciona en diferentes fases. Tu mismo vas a estar capacitado para encontrar tu propia guía que facilite tu adaptación, no obstante te enumeraré algunas recomendaciones para ayudarte a tu mejor adaptación:
1. Comunica y explica a tu familia y amigos tu decisión o situación, si tienes hijos, adaptate a su lenguaje pero mantenles bien informados y escúchales activamente. En definitiva, se trata de poder otorgar la oportunidad de despedida recíproca, buscar apoyo y no sentirte solo en tu marcha y evitar siempre cualquier posible sensación de huida.
2. Acepta vivir la vida con un margen de incertidumbre, ello te permitirá ser mas flexible, seguro y poder vivir con mayor serenidad un entorno diferente que aún no conoces en profundidad.
3. Aprende, acepta e incorpora el lenguaje, costumbres, hábitos, modas, etc., que encuentres en la ciudad nueva, sin que ello implique o puedas considerarlo un ataque o pérdida de identidad. Cuanto menos diferencias marques mejor será tu integración. Mézclate, aunque sé que cuesta mucho al principio, con personas de la nueva ciudad, si busca amistades o círculos únicamente con gente de tu ciudad de origen seguramente no puedas sentirte integrado plenamente nunca.
4. Enorgullécete de tus raíces y costumbres adquiridas de tu ciudad de origen, agradece si alguien te pregunta por tu antigua ciudad, cuando vayas teniendo intimidad con tus «nuevos vecinos» comparte tus costumbres. Mantén en casa tus antiguos hábitos.
5. Se amable e intenta dar lo mejor de ti, ten en cuenta que normalmente en la vida uno recoge lo que siembra. Ahora que tienes la oportunidad de empezar a crearte un nuevo entorno, quizás sea bueno que revises posibles errores que has cometido en el pasado para no volver a repetirlos y sobretodo potenciar tus buenas prácticas.
6. Ten presente que un cambio de ciudad, no suele ayudar a la solución de problemas emocionales, el equipaje de mayor peso e importancia que llevas eres tu mismo, si tienes problemas y no los solucionas, probablemente si huyes a otra ciudad vuelvan a aparecer aunque sea en otro contexto o con «personajes diferentes».
¿tienes alguna recomendación que darnos? Si te apetece o consideras oportuno, por favor no dudes en dejar un comentario.